El otro día estuve en unas jornadas que aunaban aquello de
la evidencia científica con el lado económico, en ella juntos, médicos y farmacéuticos.
Son jornadas que hace unos años eran difíciles
de ver, por supuesto, promovidas por la industria farmacéutica que se ha querido
subir al carro de la justificación económica. Entre otras cosas porque no le
queda otra, ahora el ministerio es mucho más riguroso en los análisis de costes
a la hora de dar luz verde al precio de un medicamento nuevo.
Hoy por hoy podemos decir que son las “jornadas” de moda en
la mayoría de especialidades sanitarias. La jornadas estuvieron bien, mucha
reflexión sobre la mesa, pero me llamó la atención una ponente de un
laboratorio farmacéutico que casi evangelizó varias veces la frase de “El 2014
es el año de la economía de la salud”.
La verdad es que no se si tendrá razón o
no, lo que es verdad es que podíamos haber escuchado esto hace ya muchos años y
quizás ahora estaríamos hablando de otro panorama sanitario (o quizás no).