Es frecuente en el mundo sanitario público, agudizado en el hospitalario, encontrarnos servicios clínicos inconexos y donde cada uno tira por donde puede (y quiere). Digo agudizado en el mundo hospitalario porque aquí los egos son muy grandes y muchos se sienten "dioses" y si el compañero dice "digo", yo digo "diego" porque estoy mas preparado y se mas que el. Se me ocurren muchos ejemplos de servicios clínicos de hospitales donde he trabajado, pero seguro que vosotros también teneis alguno en el mundillo sanitario, ya sea hospitalario o no.
Todas estas actitudes individuales y "ego-istas" estarían muy bien si estuviésemos hablando de fútbol o de que opinas tu de la última canción de U2 , pero no parece que esté tan bien cuando hablamos de pacientes y compañeros de profesión.
Además las consecuencias son devastadoras, gasto de mayores recursos, desmotivación y "cabreo" permanente del personal, mayor riesgo de errores a todos los niveles etc...
No es que vayamos a dar un giro de 360º a esto, pero y si intentásemos consensuar nuestra actividad, escuchar de vez en cuando a alguien mas que a nosotros, respetar las decisiones acordadas e intentar tender un brazo en vez de poner zancadillas, quizás todo sea mas fácil para todos.
A lo mejor lo de trabajar en equipo se debería dar en la facultad de carreras sanitarias, a lo mejor las diversas instituciones deberían prestar mas atención al asunto, es la base de las mejores empresas y el de los mejores equipos de cualquier deporte, eso a nadie se le escapa.
Pero claro no todo es negro, del mismo modo conozco grandes servicios que "funcionan" en todos los aspectos debidos a la cohesión del grupo y el sentido de trabajo en equipo, y estos deben ser un ejemplo para los demás.
Aunque nos cueste, aparquemos nuestro egocentrismo y démosle una oportunidad al trabajo en equipo, el paciente nos lo agredecerá, y que yo sepa si estamos aquí es por él.
Enhorabuena por el blog, el tema de trabajo en equipo es muy intersante y nos compete a todos los sanitarios, dentro y fuera del hospital; los centros de salud son un buen ejemplo de ello.
ResponderEliminarEs un tema de fácil teoría y sin embargo difícil de poner en practica porque la capacidad de trabajo en equipo se aprenhende y forma parte de nuestra personalidad a lo largo de vida proyectandose en la interacción que somos capaces de desarrollar con los demás. Tiene mucho que ver con nuestra capacidad de comunicarnos y de empatizar.
Hay dos elementos claves a mi modo de ver , el primero la formación de los equipos; a veces estos surgen de forma natural y cada uno según su personalidad se va integrando y asumiendo un papel dentro del mismo , pero otras muchas veces “caemos en un equipo” al cual nos vemos obligados a adaptarnos. Para que esa adaptación sea exitosa hemos de valorar claramente las potencialidades y limitaciones de los demás y las nuestras propias, definiendo claramente nuestro rol.
El segundo factor es el objetivo u objetivos que tenga el equipo, los cuales deben ser aceptados e interiorizados por todos, para que cada uno de nosotros valoremos a los demás, nos valoremos y nos sintamos valorados como importantes, Es decir la dinámica del propio equipo nos debe retroalimentar y motivar en un continuo .Esto constituirá un equipo sinérgico y competitivo.
La tarea no es fácil y a veces la propia institución la dificulta, porque no facilita la organización ni los recursos para funcionar como nosotros queremos, pero no lo olvidemos el valor motivacional mas importante somos siempre nosotros mismos .No hay equipos perfectos y no tirar la toalla en el día a día, es siempre un ejercicio de madurez.
M.Carmen Gómez Gonzalez
Carmen, excelente reflexión que complementa muy bien la entrada.
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